La hija adoptiva de Angelina Jolie y Brad Pitt, Zahara, ya no es la adorable y sonriente niña que veíamos saludando a las cámaras del mundo en brazos de sus padres, ahora es toda una señorita y procura siempre estar perfecta con su propio estilo.
Hace unos días los paparazzis perseguían a Angelina y se encontraron con que estaba disfrutando de algunos momentos con Sahara y su otro hijo Knox Leon. En las imágenes se ve a la joven con un jumpsuit strapless a rayas blancas y celestes que combinó con unos zapatos Gucci estilo tennis con tacón.
No es la primera vez que Zahara destaca por su outfit. En las pocas apariciones públicas que ha hecho con su madre siempre se le ve elegante, con colores sobrios, preferiblemente negro y muy acorde con su madre, una de las actrices mejor vestidas de Hollywood.