Se repite la historia

A pocos días de haber asumido el cargo como Ministro de Minas y Energía (septiembre de 2013) recibí una llamada del reconocido periodista Darío Arismendi, fundador y Director del diario El Mundo de Medellín, quien a la sazón conducía el programa noticioso de Caracol – radio 6 a.m. 9 a.m. Hoy por Hoy. Se trataba de hacerme la primera entrevista al aire en torno a mis expectativas y propósitos en ejercicio de esta cartera. En el transcurso de la misma lo sorprendí cuando, de un momento a otro, afirmé que yo había perdido la virginidad política en Antioquia.

Cuando se repuso de su asombro, me pidió que le explicara lo dicho. Yo le conté que me había iniciado en la política como Concejal de Medellín durante el período, que para aquel entonces era de dos años, 1974 – 1976, a la edad de 23 años y justo cuando estaba terminando mi carrera de Economía en el Alma mater de la raza antioqueña, la Universidad de Antioquia. Posteriormente sería Concejal de Riohacha, capital del Departamento de La Guajira, diputado a la Asamblea, escalando hasta llegar al Senado de la República, al cual fui elegido para tres períodos (1991 – 1994, 1994 – 1998 y 1998 – 2002), desempeñándome como Presidente del Congreso de la República durante el período legislativo 1997 – 1998.

Traigo a colación esta historia a propósito de la reciente elección en la justa democrática del pasado 29 de octubre de mi paisano Miguel Ángel Iguarán Osorio como Concejal de Medellín para el período 2024 – 2027 (¡!). Sus padres, mi amigo y coterráneo Rafael Iguarán y mi amiga, la paisa Amparo Osorio, fueron mis condiscípulos en la Universidad de Antioquia, en donde se conocieron y se enamoraron hasta contraer nupcias, graduándose ambos en Química y farmacia.

Sus vidas han sido paralelas con la nuestras y nuestra amistad se prolonga en el tiempo: mi esposa Nydia y yo también nos conocimos allí y nuestros hijos (Camilo Ernesto y Juan David) también nacieron en Medellín y crecieron en Riohacha toda su adolescencia. Miguel Ángel, al igual que ellos, nació en Medellín, fue bautizado y confirmado en Riohacha, en donde cursó su primaria en el Colegio María Montessori y recibió su cartón de bachiller en el Colegio Cerromar.

Este joven inteligente y talentoso, abogado de la Universidad EAFIT y especialista en derecho administrativo de la Universidad Externado de  Ex concejal de Medellín Colombia, puede entonar la canción de uno de los juglares del Vallenato, Carlos Huertas, El cantor de Fonseca, parodiándola: nací en Medellín, la capital de la montaña, de donde muy pequeño me llevaron, allá en Riohacha me bautizaron y en toda La Guajira me hice libre!

El antecedente más remoto de un guajiro elegido a una corporación pública por los votantes antioqueños se registró en el siglo XIX, cuando fue elegido como Representante por el Estado soberano de Antioquia el ilustre guajiro Luis Antonio, El Negro, Robles. Su candidatura estuvo aupada por el General Rafael Uribe Uribe, de quien fue su mano derecha. La profusión del género epistolar entre ellos, cuyos documentos reposan en el Museo de Antioquia, dan buena cuenta de su entrañable amistad a toda prueba, anclada en su espíritu republicano y libertario.

La formación y preparación, así como su experiencia en Seguridad y convivencia en el Área Metropolitana de Medellín, en Inclusión social y familia, del Concejal Miguel Ángel auguran su buen desempeño, ahora que asume la responsabilidad de representar en el recinto del Concejo de Medellín, por el que, a mucho honor, pasé, hace ya casi 50 años (¡!), a partir del 1 de enero de 2024, no sólo a sus electores sino a todos los medellinenses. Enhorabuena, Medellín tendrá un Concejal que se hizo elegir con la bandera de la defensa y la protección de la niñez y de los adultos mayores y no dudamos de que honrará su compromiso con sus electores.