La India ha dado por finalizada la construcción de la estatua más grande del mundo, de 182 metros de altura, construida en honor a su «hombre de hierro», Sardar Patel, uno de los padres de la nación asiática, y que será inaugurada oficialmente el 31 de octubre por el primer ministro, Narendra Modi.
La gigantesca efigie del líder de la independencia, erigida junto al río Narmada en su estado natal de Gujarat (oeste) y con un coste aproximado de 350 millones de euros, ha sido finalizada después de
cinco años de obras, explicó a Efe el ingeniero jefe, P.C. Vyas.
«Sólo quedan unos detalles en el interior de la construcción, en una sala para visitantes construida a nivel del pecho de Sardar Patel que podrá acoger a unas 200 personas», explicó.
La faraónica escultura ha sido ideada como un centro para los turistas con hoteles, museos e incluso una flota de barcos que permitirán alcanzar la zona, y estos días los miles de obreros se esfuerzan por dar los últimos detalles al complejo.
Patel es conocido como el «hombre de hierro» del país asiático -aunque las miles de piezas de bronce que forman el exterior de la estatua han sido manufacturadas en China- por sus esfuerzos por unificar la India tras la independencia de la colonia británica el 15 de agosto de 1947.
El líder también jugó un papel clave en la integración de los más de 500 estados principescos independientes al país, por lo que la efigie ha sido bautizada como «estatua de la unidad» por Modi.
El primer ministro, que puso la primera piedra del proyecto en 2013 cuando era gobernador de Gujarat, inaugurará oficialmente la estatua el próximo 31 de octubre en un acto en el que se espera que participen líderes estatales del partido nacionalista hindú Bharatiya Janata Party (BJP).
En el evento también está previsto que participen miles de habitantes de unos 10.000 pueblos del estado en una suerte de procesión bautizada como Ekta Yatra hasta el emplazamiento de la estatua, explicó a Efe un portavoz de la organización, Dilip Joshi.
El presidente del BJP en Gujarat, Jitu Vaghani, afirmó que la marcha «servirá para llegar hasta la población y destacar el desarrollo que hemos alcanzado en el estado y en toda la India», según declaraciones recogidas por la agencia local IANS.
Sin embargo, el analista político Apoorvanand Jha describió la inauguración de la efigie, que ha desbancado del primer puesto en altura al Buda del Templo de Primavera, de 153 metros situado en China,
como un acto temprano de campaña electoral antes de los comicios generales del año próximo.
«Para Modi, la estatua demuestra el poder de la India al ser la más alta del mundo, una India que ha llegado a la escena internacional y no puede ser ignorada por el resto del mundo», explicó a Efe Jha.
Patel perteneció al Partido del Congreso y fue ministro de Interior en el primer Gobierno de la India independiente, encabezado por Jawaharlal Nehru.
Jha criticó la decisión de Modi de ensalzar al «hombre de hierro» como un intento del BJP para apropiarse de su figura y «crear una historia paralela de la lucha por la independencia en la India».
«Patel es presentado como el verdadero unificador y creador de la India, uniendo todos los reinos y estados en una sola entidad nacional. Ahora es presentado como un líder fuerte opuesto a Nehru y a (mahatma) Gandhi, calificados de débiles», lamentó.
El especialista en nacionalismo hindú y autor de una biografía de Modi, Nilangan Mukhopadhyay, también denunció el intento de apropiación de Patel por el grupo hinduista de extrema derecha RSS, matriz del BJP.
«El RSS no tuvo nada que ver con la lucha por la independencia. ¿Cómo justificas ocupar el poder en el país sin decir que fuiste parte del movimiento anticolonial?», se preguntó Mukhopadhyay.
La respuesta, explicó, pasa por asimilar la figura de Patel y enfrentarla a la de Nehru, «falsificando» la historia de un líder que siempre se mantuvo firme contra el nacionalismo hindú.
Por David Asta Alares