Un trágico incidente se registró en el remoto archipiélago de las Islas Chatham, en el este de Nueva Zelanda, donde un joven submarinista perdió la vida tras ser atacado por un tiburón mientras practicaba buceo.
La víctima, identificada como Jade Kahukore-Dixon, de 24 años, fue rápidamente trasladada a un hospital en las Islas Chatham, ubicadas a unos 800 kilómetros de la Isla Sur. A pesar de los esfuerzos médicos por salvar su vida, falleció debido a las graves heridas sufridas en el ataque del escualo.
La Policía de Nueva Zelanda informó que el ataque ocurrió durante una inmersión en aguas cercanas al archipiélago, una zona conocida por su rica vida marina, pero también por los riesgos asociados a los encuentros con tiburones. Aún no se ha confirmado la especie de tiburón involucrada en el incidente, aunque este tipo de ataques son extremadamente raros en la región.
El suceso ha conmocionado a la comunidad local y a los aficionados al buceo, que consideran a las Islas Chatham como un destino popular para la práctica de esta actividad. Las autoridades locales han expresado sus condolencias a la familia de la víctima y han iniciado una investigación para esclarecer las circunstancias del ataque.
Este trágico evento resalta los peligros inherentes al buceo en áreas donde habitan tiburones y otras especies marinas. Las autoridades recomiendan a los practicantes de deportes acuáticos extremar las precauciones y mantenerse informados sobre las condiciones del mar y los riesgos asociados a la fauna marina en la zona.