¿Qué siente un hombre cuando hace la posición del misionero?

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La posición del misionero es quizás la más tradicional en los encuentros sexuales, en ella el hombre se posiciona arriba y la mujer abajo con sus piernas abiertas, para facilitar las cosas él se apoya en sus codos y rodillas.

La revista Cosmopolitan quiso dar una pequeña mirada a la mente de un hombre cuando están en el momento más hot para así lograr que revele lo que cada posición le hace sentir.

Al respecto, cuatro chicos contaron sus experiencias:

Es un clásico. Me gusta comenzar casi siempre así para que tenga el beneficio agregado de ser asociado con la sensación de la primera entrada. No hay nada como entrar en contacto con su tibia humedad de abajo. Me hace pensar que hay una razón era que los humanos evolucionaran a tener sexo de esa manera. Además, si me acerco a acabar muy pronto, sólo pienso en el nombre de la posición y me aleja de ese momento. Sam J.

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Clásico y confiable. Aunque pienso que se usa demasiado, sirve bien para varios propósitos. Es la posición donde me siento que tengo más el control de lo que está pasando, quizás en parte porque me siento cómodo por tanto usarla. Cuando tengo el control, soy más capaz de hacerme llegar al orgasmo, y se trata de eso, ¿no? También es una buena posición cuando estás con chicas sin experiencia. Ellas se sienten más cómodas cuando tú estás arriba haciendo el trabajo. Lo malo de esto es que hay mujeres que creen que su rol aquí es acostarse y disfrutar. Por mucho que me guste ver la cara de una mujer mientras tiene placer, las chicas pueden hacer mucho más cuando están de espalda. Adam K.

Es la más común. La uso cuando si quiero que las cosas se calmen. Mi problema con el misionero es que parece que las mujeres no pueden apretar mucho allá abajo y yo no puedo hacer nada muy elaborado. Es muy buena cuando te sientes romántico y quieres tener contacto visual, especialmente cuando estás acabando.Nathaniel Z.

Es una posición que tiene cosas muy buenas y muy malas. Puede ser terrible, pero la intimidad que da puede ser increíble. Ver los ojos de tu chica y darte cuenta si está sintiendo placer o vergüenza es realmente un momento de confianza y miedo. Es la posición perfecta para tu primera vez de sexo estando sobrio o después de haberle dicho que la amas.Cal A.

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