La Procuraduría General de la Nación abrió una investigación sobre una presunta negligencia de la entidad encargada del caso de una niña de 11 años, que presuntamente fue abusada sexualmente por su padre en Bogotá.
Según la denuncia de la madre, al acudir al CAI de Santo Domingo para reportar los hechos, se le informó que solo recibían denuncias de lunes a viernes.
Posteriormente, en el hospital de Meissen, donde fue atendida la menor de edad, un grupo de agentes habría abandonado el lugar sin escuchar la versión de la madre.
Ante estas graves acusaciones, la Procuraduría le ha solicitado al secretario de Salud de Bogotá, Gerson Bermont, un informe detallado sobre cómo se activaron los protocolos de protección y justicia en este caso de la niña de 11 años.
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Asimismo, la Procuraduría Primera Distrital se encargará de recopilar pruebas en entidades como el CAI y el ICBF para determinar si se cumplieron los procedimientos establecidos por la ley.
Este caso ha generado gran conmoción en la ciudad y ha puesto en el ojo del huracán la respuesta de las autoridades ante denuncias de abuso sexual.
La Procuraduría ha dejado claro que no tolerará ninguna negligencia en la atención de estos casos.
Es fundamental que las instituciones garanticen una atención efectiva a las víctimas de abuso sexual, y que se establezcan protocolos claros para prevenir este tipo de delito, para la protección de las víctimas.
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