Los bandidos compraban el queso a muy bajo costo en Venezuela para luego ingresarlo al territorio aduanero colombiano.
Se estima que alcanzaron a ingresar 100 toneladas del producto.
El general Juan Carlos Buitrago, comandante de la Policía Fiscal y Aduanera, afirmó que «han sido capturadas cuatro personas, dos de ellos los más importantes». Los otros dos se dieron a la fuga hacia el vecino país, pero fueron capturados antes de ingresar al mismo.
Los bandidos usaban cloruro de calcio para dar apariencia de frescura al producto aún estando en descomposición.
El queso alcanzó a ser distribuido en Arauca, Casanare, Meta y Bogotá, según detalló el uniformado.