Madrid, 11 ene (EFE).- El candidato presidencial colombiano de la coalición Pacto Histórico, Gustavo Petro, arropado este lunes por las principales fuerzas izquierdistas españolas, planteó un pacto entre el empresariado, el Estado y los trabajadores para garantizar la estabilidad laboral en su país, que es “fundamental”.
Petro cerró un acto en Madrid con simpatizantes de esa coalición colombiana de izquierdas, apoyado por representantes del Partido Socialista, Podemos e Izquierda Unida, que forman el gobierno español de coalición, y de los sindicatos mayoritarios UGT y CCOO.
En general, le desearon un apoyo electoral “masivo” en los comicios presidenciales del 29 de mayo para que la paz, los derechos humanos, la igualdad y la democracia efectivas se asienten en Colombia frente a la violencia, la extrema derecha y las oligarquías, dijeron.
Petro, que valoró el reciente acuerdo laboral de España entre empresarios y sindicatos, se reunió hoy con el líder socialista español y jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, a quien propuso, según explicó, la configuración de una coalición de fuerzas sociales y políticas iberoamericanas con retos y planes concretos como resolver el cambio climático y salvar a la especie humana.
Igualmente, se entrevistó con empresarios de varios sectores (España es el segundo inversor internacional en Colombia), a quienes Petro dijo que la clave es cómo transitar a una economía productiva y no extractiva, cómo alejarse de las energías fósiles y cómo la conectividad y el conocimiento pueden ser la base de la nueva producción.
En una agenda muy apretada, Petro se vio con la vicepresidenta segunda del Gobierno español y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, y la ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, ambas de Unidas Podemos.
Petro aseguró que el programa de Pacto Histórico es cumplir con los objetivos del milenio (ahora objetivos de desarrollo sostenible), “humanizar Colombia”, la política y la sociedad y “no matarse”.
Priorizó luchar contra el cambio climático como principal problema de la humanidad y transformar el servicio diplomático para que verdaderamente esté al servicio de los colombianos en el extranjero y se reconozcan sus derechos como personas donde quiera que vivan.
Arremetió contra las políticas liberales del presidente Iván Duque, a quien responsabilizó de que la pobreza se haya disparado en Colombia, aseguró, durante la pandemia.
Propuso transitar de un “régimen autoritario”, “fascista” a la colombiana, hacia una democracia; de la violencia hacia la paz; de la “degradación” de la fuerza pública al respeto de los derechos humanos; y de la injusticia hacia la justicia, que es hablar de «igualdad y equidad».
La comunidad colombiana es la primera en España entre los residentes latinoamericanos.