Santiago de Chile, 9 feb (EFE).- Los nietos del expresidente chileno Sebastián Piñera, fallecido el martes pasado en un accidente de helicóptero, le brindaron este viernes una emotiva despedida en la misa fúnebre celebrada en la Catedral Metropolitana de Santiago y resaltaron la faceta juguetona del que fue el primer presidente de derechas en llegar al poder tras la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).
"Me quedo tranquilo por el orgullo que cargo en mi corazón, por el honor de haber tenido a Sebastián como abuelo, y hablo en nombre de sus 14 nietos", dijo León, el nieto mayor de Piñera.
El joven, de 18 años, reconoció que el exgobernante es su "más grande ídolo" y dijo que sus nietos "nunca olvidarán el espíritu aventurero que contagió a todos" ni los juegos con los que les hacía reír, como "la pelea del siglo".
"El nombre de Sebastián Piñera Echenique será recordado para siempre: un hombre único, honrado, valiente, perseverante, empático y respetuoso; un hombre que no conocía el odio y mucho menos el rencor y, sobre todo, el hombre más inteligente que conocí".
También habló su nieta Esperanza, quien le califico de "ser inigualable" y "el mejor abuelo".
"Ni yo ni ninguno de mis primos aprendió tanto en el colegio como lo hicimos aprendiendo en las sobremesas, cuando te ponías a contar tus historias, cuando nos enseñabas de Historia, de cultura, de geografía, de amor, y todas las cosas que un hombre tan sabio como tú sabe", apuntó.
Chile despidió este viernes en un emotivo y solemne funeral de Estado al exmandatario, que gobernó en dos periodos no consecutivos (2010-2014 y 2018-2022) y que pilotaba el helicóptero que se precipitó el martes por causas que aún se desconocen sobre el Lago Ranco, un exclusivo balneario a más de 800 kilómetros al sur de la capital donde pasaba los veranos con su familia.
Antes de la misa fúnebre, los tres poderes del Estado le rindieron homenaje en la antigua sede del Congreso Nacional en Santiago, donde miles de ciudadanos anónimos se acercaron miércoles y jueves a darle el último adiós.
Poseedor de una de las mayores fortunas de Chile, en sus mandatos le tocó gestionar la reconstrucción del país tras el devastador terremoto de 2010, el épico rescate de los 33 mineros y la exitosa campaña de vacunación de la pandemia.
Sin embargo, uno de los puntos más oscuros de su gestión fue el estallido social de 2019, durante su segundo Gobierno, que dejó una treintena de muertos y señalamientos contra las fuerzas de seguridad por violaciones a los derechos humanos.
Por: EFE