Misty Spann, de 26 años, se declaró culpable de incesto ante la justicia estadounidense al admitir haberse casado con su madre, luego de que ambas se enamoraran.
Spann fue criada por su abuela luego de que su progenitora, Patricia Spann, perdiera la custodia de sus tres hijos.
Patricia ya se había casado con uno de sus hijos en el año 2008. Él pidió el divorcio quince días después citando el incesto como la causa.
Misty y Patricia se reencontraron en 2014 e iniciaron su relación. Ambas contrajeron nupcias en el condado de Comanche, Oklahoma, pero el incesto fue descubierto por las autoridades cinco meses después del casamiento, en el curso de una investigación por maltrato infantil.
Tras el reencuentro, la mujer consideró casarse con su hija pues erróneamente creyó que no podrían ser atrapadas, porque su apellido no aparecía más en el certificado de nacimiento.
El matrimonio fue anulado por la hija, quien aseguró que su madre le había dicho que no tendrían ningún problema con la ley si se casaban.
Misty fue condenada a 10 años de libertad condicional luego de admitir el incesto ante la Corte. Patricia, por su parte, irá a juicio en enero.