Un lujoso crucero turístico permanece retenido desde hace 20 días en el puerto de Buenos Aires, Argentina, debido a una millonaria demanda contra la empresa encargada del viaje, el cual se suponía que debía llegar hasta la Antártida, por lo que todos sus pasajeros que pagaron hasta 20.000 dólares por la experiencia debieron volver a sus países.
Alrededor de 500 pasajeros se vieron afectados y obligados a regresar a sus hogares por cuenta propia, sin contar con otras miles de personas que ya habían abonado para futuros viajes en el mismo crucero.
La embarcación debió de zarpar el pasado 1 de noviembre hacia Ushuaia, desde donde seguiría su camino, sin embargo un abogado argentino en representación de empresas de Dinamarca demandaron a la compañía canadiense One Ocean Expeditions (OOE), por no realizar un pago tras la carga de combustible del crucero, deuda que llegaría a los “siete dígitos” en dólares.
Ante esto un juez prohibió la navegación de la embarcación hasta que se solucione la demanda judicial, dejando a sus pasajeros sin la experiencia y sin un reembolso, pues estos aseguran que la empresa se desapareció tras lo ocurrido, por su parte la tripulación que pertenece a una empresa alemana permanece a bordo.
El barco no será liberado hasta que la deuda este saldada y ante la ausencia de representantes de OOE, el dueño del barco deberá responder los pagos.
Por su parte OOE emitió un comunicado el pasado 29 de octubre donde afirma que “desafortunadamente, la difícil realidad es que en los últimos meses no hemos estado a la altura de las altas expectativas que nos fijamos como líderes en la industria de cruceros de expedición”, agregando que “debido al incumplimiento del contrato sufrido a principios de este año la empresa ahora se encuentra en un difícil periodo de reestructuración”.
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