Momo es un contacto macabro de WhatsApp que tiene como foto de perfil la imagen de una mujer con ojos saltones, una sonrisa distorsionada y patas de pollo. Al agregarla, esta mujer que está basada o que sería realmente la escultura de una artista japonesa, dirá cosas específicas sobre su interlocutor y enviará contenido violento.
Por otra parte, es inútil intentar eliminar el número procedente de Japón una vez se haya agregado, porque aparecerá cada vez que lo hagas, cual muñeco de película de terror. Además de escribir datos correctos sobre quien la contacte, Momo también determina en cuantos días se dará la muerte de dicha persona.
Los comentarios más acertados al respecto, dicen que se trata de un bot para recolectar datos y en general hackear cuentas. Este contacto habla en el idioma que de quien la contacte con frases simples, entre las cuales también pide el suicidio de la persona con quien conversa.
En cuanto a los suicidios, según el Diario Popular, lo que sería más que una conversación con ‘Momo’ y que pasaría a ser ‘el juego de Momo’, tuvo un primer caso con una argentina de 12 años que fue hallada muerta y su motivo de deceso se asoció con los diálogos por WhatsApp.
Momo, de cuyo nombre no existe hasta ahora una razón, habría nacido en un grupo anónimo de Facebook en el que se ponía un número telefónico con la advertencia de no llamar, por lo que muchos lo hacían e inmediatamente recibían el contenido sobre la vida personal y el contenido violento sobre otras personas.
La imagen como tal de Momo, fue creada por una compañía de efectos especiales llamada Link Factory, y fue expuesta en Ghost Gallery de 2016.