Resumen: Este es un caso realmente preocupante que pone de manifiesto la falta de empatía y responsabilidad de ciertos individuos en las redes sociales. Natalie Reynolds, como influencer, tiene una plataforma que le otorga poder y alcance sobre una audiencia, y con ese poder viene una gran responsabilidad. Desde el momento en que Reynolds propuso el reto y la persona advirtió que no sabía nadar, debería haber detenido la situación de inmediato. La seguridad y el bienestar de los participantes deberían haber sido su prioridad absoluta. En lugar de eso, parece haber ignorado los peligros y siguió adelante con el desafío, incluso cuando la persona mostró signos de miedo y peligro. El hecho de que Reynolds considerara llamar a la policía después del incidente muestra que tal vez tuvo un destello de conciencia, pero su actitud durante el reto y su posterior comentario de que "no es su culpa" sugieren una falta de asunción de responsabilidad por sus acciones. Es importante que las personas que tienen una plataforma en las redes sociales utilicen su influencia de manera responsable, promoviendo comportamientos seguros y éticos. Este caso subraya la necesidad de reflexionar sobre el impacto que nuestras acciones pueden tener en los demás, especialmente en un entorno tan público como las redes sociales.
La influenciadora Natalie Reynolds ha causado indignación en redes sociales por un reto a una mujer que no sabía nadar ofreciendo dinero.
Identificada como una asidua influencer que hace contenidos virales, Natalie Reynolds ha sido expuesta por los internautas al hacer un reto que se desconoce el final que pudo haber sido trágico. De acuerdo a los medios, la joven retó a una mujer a lanzarse a un lago «sin saber nadar» ofreciéndole $20 dólares.
Antes de aceptar el reto, la mujer le advierte que no sabe nadar y los que graban no detuvieron la grabación pues eso ya era un riesgo. El periódico The New York Post comparte que, «la mujer de 40 años que aceptó hacerlo dijo claramente un motivo para terminar el en vivo que Natalie transmitía».
Con un «simplemente salte» Reynolds le dice y ella salta. «Dijiste que estaba bien, me dijiste que participara» le responde la mujer que en el agua parece no estar bien a lo que la influencer sale asustada corriendo al ver que la participante del reto chapalea con temor. «Dejándola sola totalmente a su suerte». Pero quienes la acompañaban no se inmutan y solo comparten risas con la frase esto es malo. «¡No sé nadar, solo puedo flotar!» se escucha repetidamente en lo transmitido.
Culpable o inocente
Pensando en su responsabilidad el video muestra que la influencer, muestra un poco de consideración. «¿Deberíamos llamar a la Policía?», dice Natalie Reynolds a su amigos quienes solo se limitan a apuntar «que el desafío debe continuar». Luego en el video se le ve a la influencer en un auto y con cara de afligida cuando pasa un camión de emergencia que seguramente se dirige a auxiliar a la señora que por $20 dólares le siguió el reto. La grabación termina con una Natalie «expresando que no es su culpa». Por este viral en redes se hace la reflexión sobre quienes se aprovechan de las personas vulnerables, ya que son en realidad la peor clase de personas que existen».
@dailymail Natalie Reynolds has sparked fury after a cheap social media stunt. While many details remain unclear, Austin Fire Department confirmed they were called to the lake for a ‘medical call’ for a rescue. #kick #streamer #twitch #breakingnews #news #austin #streaming ♬ i was only temporary – my head is empty
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