La alta cocina española reinterpreta el paladar en Colombia

La alta cocina española cruza el Atlántico y se abre camino en Colombia con un nuevo concepto gastronómico en el primer «Gourmet Showroom» del país, un lugar dedicado al deleite de la buena mesa que combina la degustación con la venta y la difusión de una amplia selección de productos exclusivos.

Ver, probar y comprar es el lema que lideran los empresarios Ángel Gallego y Víctor Martín, quienes regentan el restaurante La Peseta Gourmet, situado en el norte de la capital colombiana, que desde su inauguración, el pasado mes de abril, no ha parado de conquistar el «exigente paladar» de los bogotanos.

«La Peseta no es una tienda al uso, ni tampoco un restaurante convencional; es toda una experiencia en la que se puede comer y comprar al mismo tiempo», dijo Martín, uno de los creadores de esta novedosa tendencia que internacionaliza el arte culinario español.

La idea original del restaurante, que nació para «rendir homenaje» a los encantos de «la madre patria», era actuar como distribuidor, pero los artículos eran desconocidos para el gran público y decidieron instalar este «catálogo físico», confesó el empresario.

Para ello, estos dos trotamundos, sin formación gastronómica alguna, uno financiero y el otro ingeniero aeronáutico, dejaron sus consolidadas actividades profesionales y se lanzaron a la aventura colombiana «por pura pasión».

«Colombia es muy atractivo para invertir», reveló Martín al considerar el país elegido como el idóneo por sus «condiciones geopolíticas» y, sobre todo, por la evolución de la clase media, que irrumpe paulatinamente en el terreno de lo culinario.

El único inconveniente es una regulación alimentaria «compleja» , por la que se requiere de una infinidad de permisos sanitarios y que «dilata» el proceso de registro en el tiempo para estos dos socios.

Con el propósito de dar a conocer en profundidad las materias primas que exhiben, en La Peseta asesoran y orientan en el momento de la compra para explicar «al detalle» cada producto en función de las necesidades y los gustos del consumidor.

Y es que estos dos embajadores de la alta cocina, que importan las tradicionales tapas y raciones españolas al país de las arepas y el plátano, buscan la distinción de sus existencias a través del uso exclusivo de ingredientes y productos de calidad.

«La elección cuidada de las materias primas, el uso de métodos tradicionales de elaboración y una presentación adecuada» son las claves del éxito de este establecimiento, que cuenta con más de 400 productos a disposición del público, explica.

Asimismo, el primer «Gourmet Showroom» dispone de artículos únicos en el mercado colombiano y los distribuye únicamente a las tiendas que comparten su «filosofía», que consiste en «tratar, mimar y saber contar» la gastronomía española.

«La oferta del mercado español es aún limitada en Colombia», aseguró el fundador del restaurante al reconocer que la buena acogida de su concepto da seña de la «identidad y del gran potencial» de la cocina española.

En su opinión, el mercado no está saturado porque «a las grandes compañías no les compensa el esfuerzo que hay que hacer para entrar en el mercado para los volúmenes que van a conseguir a corto plazo».

El resultado es este punto de encuentro gastronómico en el que el producto estrella es el jamón ibérico, seguido del lomo, el chorizo y el aceite de oliva virgen extra, entre otros.

«Nuestra meta es convertirnos en el referente del producto español gourmet en el país», reveló Martín, quien planea a futuro expandirse por Medellín, Barranquilla y Cartagena.

Bajo el sello de la cocina española, La Peseta busca posicionarse como marca España con conceptos como delicatesen y natural para reinterpretar con su aportación los platos colombianos.