Buenos Aires, 12 ene (EFE).- El presidente de Argentina, Javier Milei, "tiene intención" de viajar al Vaticano para presenciar la misa solemne de canonización de la beata María Antonia de Paz y Figueroa, conocida popularmente como "Mama Antula", que tendrá lugar el próximo 11 de febrero, informaron este viernes fuentes oficiales.
Según un comunicado de la Cancillería argentina, la titular de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto, Diana Mondino, informó de este hecho durante un encuentro mantenido hoy en Buenos Aires con el nuncio apostólico, monseñor Miroslaw Adamczyk, y el consejero de Nunciatura, monseñor Daniele Liessi.
Pese a que varios medios argentinos publicaron a primera hora de este viernes que el libertario tenía previsto reunirse con el papa Francisco el 11 de febrero en la Santa Sede -previo paso por Israel, aprovechando una invitación del primer ministro de ese país, Benjamin Netanyahu-, la Presidencia salió rápidamente a desmentir que ese desplazamiento estuviera confirmado.
"No hay ningún viaje confirmado ni al Vaticano ni a Israel", dijo el portavoz presidencial, Manuel Adorni, en su rueda de prensa de este viernes en la Casa Rosada (sede del Gobierno).
Mondino, que solo citó la "intención" de viajar del mandatario, aprovechó la reunión con el representante de la Santa Sede para entregarle en mano la carta escrita por Milei, datada el 8 de enero pero difundida el día 11, en la que le transmitía el "filial afecto del pueblo argentino" e invitaba a Jorge Mario Bergoglio a visitar su país natal, al que no ha vuelto desde que fue nombrado jefe de la iglesia católica, en 2013.
"Su presencia y su mensaje contribuirán a la tan deseada unidad de todos nuestros compatriotas y nos brindará la fuerza colectiva necesaria para preservar nuestra paz y trabajar por la prosperidad y el engrandecimiento de nuestra querida República Argentina", aseguró el presidente en la misiva, publicada el miércoles en sus redes sociales.
Milei especificó su "alta consideración y respeto" por la obra y la persona de Francisco, una opinión que contrasta con la expresada por el libertario en el pasado cuando consideró al pontífice un "representante del maligno en la tierra" y un partidario de "las dictaduras sangrientas".
Posteriormente, lamentó sus palabras y agradeció a Francisco sus "sabios consejos y sus deseos de coraje y sabiduría" cuando ambos conversaron el 22 de noviembre, días después de que el libertario se convirtiese en el presidente electo de Argentina.
Según explicó el Gobierno en aquel momento, el papa expresó sus mejores deseos a Milei y sus colaboradores y le envió un rosario bendecido.
Jorge Mario Bergoglio, nacido en 1936 en Buenos Aires, fue invitado a la asunción presidencial de Milei el 10 de diciembre, pero no pudo asistir a la ceremonia.
Los viajes oficiales del papa, quien cumplió 87 años en diciembre pasado y tiene una salud deteriorada, son cada vez menos habituales.
Por: EFE