Las comunidades de los municipios de Corinto y Caloto, en el departamento del Cauca, quedaron en medio de intensos combates entre las disidencias de las Farc y las fuerzas de seguridad.
Los hechos se presentaron el 7 y 8 de octubre, en donde los ciudadanos se vieron obligados a resguardarse en sus viviendas ante el intercambio de disparos.
Según versiones preliminares, los delincuentes ingresaron fuertemente armados a una discoteca, donde indiscriminadamente atacaron a un grupo de personas, dejando como saldo tres muertos y cinco heridos.
En la mañana de este martes, en ambos municipios, durante los enfrentamientos, las disidencias Farc ingresaron en camionetas a la entidad bancaria, hurtando al menos $15 millones de pesos.
Las autoridades confirmaron que, tras una ardua operación, lograron repeler el ataque y obligar a los disidentes a replegarse hacia zonas rurales. Sin embargo, la situación sigue siendo tensa en la región, donde se han registrado constantes enfrentamientos entre grupos armados ilegales que buscan controlar las rutas del narcotráfico.
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Cabe recordar que en la zona de Toribío se libra una cruenta disputa territorial entre la estructura de Dagoberto Ramos y el frente 57 Yair Bermúdez, lo que ha generado una escalada de violencia y ha puesto en riesgo la vida de cientos de civiles.
Jaime Díaz, alcalde de Toribio, en donde se dio la masacre, indicó que: “Ya sabemos que esta situación pasa por grupos armados pero preocupa que este tipo de hechos se presenten en establecimientos públicos donde hay personas que nada tienen que ver con el conflicto”, indicó Díaz.