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Cali (Colombia), 31 ene (EFE).- A sus 32 años el futbolista español Iago Falque llegó al América de Cali, uno de los equipos más grandes de Colombia, en busca de un nuevo reto tras haber hecho casi toda su carrera en la Serie A de Italia, un país que, confesó en una entrevista con Efe, lo fue todo para él.
«Italia fue todo para mí, me lo dio todo. El mayor porcentaje de mi carrera lo hice allí, me trataron increíble, viví cosas increíbles, momentos que nunca olvidaré y la verdad que una gran parte mía es italiana», dijo Falque desde Cali, que será su hogar durante la aventura en Colombia.
Sin embargo, Italia ya hace parte del pasado y la única pena que le quedó es no haber conseguido el objetivo, «que lo tenía cerca», de ser el «máximo goleador español de la historia en Italia», donde anotó 50 goles y solo le superan José Callejón y Luis Suárez.
«Ya llegó un punto en el que necesitaba salir, eran muchos años allí. Mi cabeza ya no estaba tan fresca como antes y estaba un poquito saturado», dijo el jugador, cuyo fichaje por el América se convirtió en el movimiento más sonado del mercado colombiano.
EXPECTATIVAS EN COLOMBIA
En el América de Cali, el exjugador de Torino y Roma será dirigido por Juan Carlos Osorio, exseleccionador de México y de Paraguay que es reconocido por sus rotaciones y propuestas innovadoras.
Al ser preguntado sobre si prefiere jugar como interior o como extremo, Falque dice que se puede «adaptar a cualquiera de las dos, dependiendo del rival, de lo que el equipo necesite».
«Me gusta estar en mucho contacto con el balón, me gusta jugar mucho por el medio, con libertad, pero también juego en banda. Uno se adapta a lo que el entrenador necesite y quiera, pues al final es el que manda y toma las decisiones», manifestó.
Admitió que Osorio vio muchos vídeos suyos.
«Sabe cuáles son mis características, así que sabrá dónde puedo rendir mejor en función de lo que el equipo necesite siempre», afirmó.
El futbolista vigués, formado en La Masía, afirmó también que aceptó la propuesta de los Diablos Rojos, cuatro veces subcampeones de la Copa Libertadores, motivado por la «pasión» y por «vivir una experiencia diferente a lo que había vivido» en España, Italia e Inglaterra, donde jugó en el Tottenham Hotspur.
«Tengo muchas ganas de ir al estadio, de debutar, de poco a poco ir agarrando la forma y los minutos de juego para que en el menor tiempo posible se vea al mejor Iago. Evidentemente todo tiene su proceso, todo lleva su tiempo, pero ojalá que sea muy pronto», reflexiona.
UNA VISIÓN DIFERENTE
Falque no ocultó su emoción por conocer el fútbol sudamericano de la mano del América, club con el que ya ha notado que todo es «completamente diferente» a lo que conoce, desde los entrenamientos hasta la pasión.
«Me recibieron espectacular y la verdad es que es otra forma de vivir, de entender la vida, y estoy muy feliz de la decisión que tomé», afirmó.
Cuando recibió la oferta del club caleño, Falque habló con su amigo Cristian Zapata, con quien compartió en 2020 en el Genoa y le dio «información de todo», le «habló maravillas» del torneo colombiano.
Admitió que tiene «una debilidad» por James Rodríguez, de quien dijo es un futbolista al que sigue mucho y que refleja el talento del país al que llega.
UNA PAUSA NECESARIA
El exjugador del Rayo Vallecano duró seis meses sin equipo tras dejar el Torino en el mercado de verano, lo cual vivió «bien» en su casa, en Galicia, junto a su familia porque se fue «con 10 años para el Barça».
«El Barça me fichó a mí con 10 añitos. Tengo 32 y llevo 22 años fuera de mi casa», recordó.
«Estos seis meses los aproveché para disfrutar un poco, entrenar mucho también y para disfrutar un poco de mi familia: tengo un niño de 11 meses y los abuelos disfrutaron del niño», añadió.
Para no perder ritmo ni estado físico, Falque se entrenó con el SD Compostela de la Segunda B española, algo que le vino muy bien porque «el futbolista se adecua a una burbuja, que todo sea dado por hecho» y en donde tiene todas las comodidades para entrenar.
«Allí fue volver a como jugaba en el equipo del barrio, a estar con gente muy humilde y a entrenar, divertirme. Me vino muy bien también para volver a coger esas ganas y decir voy a volver, porque al final cuando tienes un mal año, lo quieras o no, te afecta», afirmó.
Falque no tiene previsto en el corto plazo volver a La Liga española. ¿La razón? Le gusta vivir «otras experiencias».
«España la conozco, en España ya jugué, en España vivo y en España viviré. El fútbol te da experiencias y es algo muy importante y yo espero seguir viviéndolas, pero yo creo que España a corto plazo no es mi idea. Luego, directamente nunca digo nunca, pero al día de hoy no es mi idea», concluyó.
