Una vez más, la estrella de la pantalla chica, Kim Kardashian dejó a los fanáticos de una sola pieza al compartir un par de fotografías en donde cubrió lo mínimo.
La esposa de Kanye West dejó a sus fans con los ojos como dos huevos fritos, pues el bikini negro que lleva puesto le dejó muy poco a la imaginación.
No siendo suficiente la cantidad de piel de la que presumió en la mencionada red social, la empresaria mostró su lengua, dejando a más de uno encantado.