¡Muy duro! En Titiribí, hijo recibió el cuerpo de su padre que desapareció desde hacía 17 años

El cuerpo de Gildardo de Jesús Restrepo Arango, hombre y padre de familia que estaba desaparecido 17 años, fue entregado a sus familiares por La Unidad de Búsqueda de Personas Dadas por Desaparecidas (UBPD) en Titiribí (Antioquia).

A Willy* le hubiera gustado preguntarle a su padre si sintió por él amor, pues en toda su vida, nunca lo buscó ni visitó.

Y es que este padre desapareció por diecisiete años y ahora, Willy’ lleva su cuerpo en un cofre hacia la iglesia de Titiribí, en el suroeste de Antioquia.

Willy se enteró de que su papá se fue en el 2001 de Titiribí, luego de que su nombre apareciera en una lista del Frente Suroeste de las AUC, que amenazaba con la muerte y el destierro a los consumidores de drogas.

Su papá, Gildardo de Jesús Restrepo Arango, se fue huyendo para salvarse y en la huida cortó los vínculos con toda su familia y con el pueblo al que nunca volvió con vida y, sobre todo, con su hijo, el niño de entonces que ahora es un hombre de 32 años.

Ante la amenaza dejó las minas de carbón, dejó de recolectar café en estas montañas como paredes y se fue desplazado para Ciudad Bolívar, alejándose casi que por completo de los suyos.

Sin embargo, de vez en cuando Gildardo llamaba a casa, preguntaba cómo estaba la familia y él se refería a la finca donde recogía café. Pero entonces, en octubre de 2006, su padre fue a visitarlo y no lo encontró.

En el lugar, mencionaron que se había marchado para el Quindío con una de las cocineras de la finca.

Y desde entonces, nunca más se comunicó con la familia. Su madre murió esperándolo, sus hermanos no volvieron a verlo.

En abril de 2013, su familia supo que Gildardo, fue asesinado en Santuario Risaralda, en donde era recolector y fue víctima de un grupo paramilitar surgido luego de la desmovilización de las AUC.

Su cuerpo fue inhumado en la bóveda 486 del municipio de Apía y su lápida marcada como ‘NN. Abril 14-2013’.

En 2020, una hermana de Gildardo le pidió a la Unidad de Búsqueda que buscara a su hermano.

Fueron ella y Willy quienes aportaron sus muestras de ADN que luego permitieron confirmar la identidad de Gildardo.

El proceso de búsqueda llevó a los investigadores hasta Risaralda. La necropsia que hizo Medicina Legal dice que Gildardo tenía 43 años, vestía un jean café talla 32 y unas botas de caucho negras, talla 39. Cargaba dos candelas, una roja y otra azul; y una pipa artesanal.
Gildardo murió de forma violenta a causa de dos impactos de proyectil de arma de fuego.

Tras el proceso de investigación humanitaria, en mayo de 2022, Medicina Legal recuperó el cuerpo en el Cementerio San José de Apía para continuar con el proceso de identificación, que confirmó lo que esperaban los investigadores: Gildardo regresaría con su familia.

En la iglesia de Titiribí, Willy dejó el cuerpo de su padre frente al altar.

El sacerdote que disputó la ceremonia dice que la entrega de Gildardo debe llenar de esperanza a la familia porque la búsqueda fue exitosa. Más que un cuerpo, agrega, es la memoria de Gildardo que seguirá viva en el corazón de los suyos. Toda vida, concluye, cualquier vida, merece ser respetada.

Vea más noticias de Antioquia.