Durante el inicio de la integración de las cámaras de seguridad privadas con el sistema de video-vigilancia público, el alcalde Mayor, Gustavo Petro Urrego, resaltó que la función principal de las cámaras es prevenir el delito, pero esto sólo será posible si ante cualquier situación sospechosa la reacción de la autoridades policiales es verdaderamente inmediata.
También señaló que la comunidad debe saber dónde están ubicadas las cámaras, para que así mismo sirvan de herramienta persuasiva ante hechos delictivos.
Así mismo, el mandatario manifestó que otro de los factores que hace realmente eficaces estos sistemas de vigilancia es la calidad de los equipos, por lo cual hizo un llamado a los comerciantes para que procuren ir adquiriendo cámaras de última tecnología, lo cual permitirá facilitar incluso la judicialización de los delincuentes.
Por su parte, el gerente del Fondo de Vigilancia y Seguridad, Máximo José Noriega, indicó que la ciudad pasará de tener un poco más de 400 cámaras de vigilancia a 5.000 antes de terminar el gobierno de la Bogotá Humana.
Las comunidades de Toledo, San José de la Montaña e Ituango participaron en la negociación.
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