El Ejército Nacional busca a seis personas secuestradas en Arauca, en un caso atribuido al ELN

Las Fuerzas Militares confirmaron este martes 7 de enero el secuestro de seis personas en la vereda Caño Tigre, zona rural del municipio de Arauquita, en Arauca. Según las primeras indagaciones, los responsables del hecho son integrantes del frente de guerra oriental del Ejército de Liberación Nacional (ELN).

Fuentes oficiales relataron que un grupo de guerrilleros interceptó a un firmante del acuerdo de paz identificado como Ricardo Ramos, quien fue retenido junto a sus familiares. Hasta el momento, se desconoce el paradero de las víctimas.

La emergencia ocurre en una región donde operan diversos grupos armados ilegales. Tropas de la Octava División del Ejército trabajan en el área para localizar a los secuestrados y llevar a los responsables ante la justicia. La zona está ubicada a 12 kilómetros del centro poblado Filipinas, donde excombatientes de las FARC-EP y sus familias reciben medidas de protección debido a constantes amenazas e intimidaciones.

En el departamento de Arauca, el secuestro es un fenómeno recurrente. Solo en lo que va del 2025, nueve personas han sido privadas de su libertad, principalmente por el ELN, que utiliza estas prácticas como parte de su estrategia de financiación. Las víctimas suelen ser liberadas tras el pago de altas sumas de dinero.

De acuerdo con inteligencia militar, los pasos fronterizos ilegales entre Colombia y Venezuela facilitan el escondite de secuestradores y rehenes, dificultando las operaciones de rescate. Estas áreas son disputadas por diversos actores armados en una lucha por el control territorial.

Por su parte, la Fundación para el Estado de Derecho recientemente interpuso una acción popular ante el Tribunal Administrativo de Arauca contra la Presidencia y los ministerios de Defensa e Interior, exigiendo un mayor control sobre el territorio y el restablecimiento de los derechos de las comunidades afectadas. En un comunicado, señalaron: «Los grupos al margen de la ley ejercen un control social y territorial que vulnera sistemáticamente los derechos colectivos de los habitantes. Estas acciones incluyen peajes ilegales, secuestros, amenazas, confinamientos y combates».

El caso de secuestro en Arauca refleja la complejidad del conflicto armado en esta región, marcada por la presencia de grupos como el ELN, las disidencias de las FARC y el Clan del Golfo. Las autoridades continúan trabajando para garantizar la seguridad y devolver a las víctimas con vida a sus hogares.

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