El bolívar venezolano se devaluó hoy un 67 % luego de que el Banco Central de Venezuela (BCV) fijara las bandas de control para el inicio de las subastas entre 1.800 y 2.200 bolívares por dólar, un 250 % más del que había cotizado en las últimas semanas.
El sistema de subasta del Divisas Complementarias (Dicom) arrancó con una banda mínima y máxima controlada por el ente emisor en la que los ofertantes podrán hacer la puja.
En un comunicado, el BCV anunció hoy «al público en general» que la banda móvil correspondiente a la primera subasta de Dicom tendrá un rango entre 1.800 bolívares y 2.200 bolívares por dólar, ambos inclusive, lo que eleva la tasa de cambio en 250 % y 300 %, respectivamente sobre los 725 bolívares que cotizaba esa misma tasa antes de iniciar el programa.
Las subastas serán las que determinarán el precio de venta, siempre y cuando se encuentre dentro del rango definido por el Banco Central.
Sin embargo, cada comprador pagará el precio por el que ofertó independientemente del resto de las demandas, siempre que esté dentro de las bandas de control.
A través del nuevo Dicom, las personas naturales podrán optar por hasta 500 dólares trimestrales, con un límite de 2.000 dólares anuales, mientras que las empresas tendrán la opción de comprar el equivalente al 30 % de su ingreso bruto mensual, con base en su declaración de impuestos sobre la renta.
En Venezuela existen dos tipos de cambio, uno protegido, que es dirigido a «bienes y servicios y remesas identificadas como prioritarias», denominado Dipro (Cambio de Divisas Protegidas), que ronda los 10 bolívares por dólar; y el Dicom, utilizado para el resto de productos de consumos y servicios.
El Dicom comenzó a operar en marzo del año pasado en 200 bolívares y hasta esta semana se ubicó en 725 bolívares por dólar.
El Estado venezolano monopoliza el flujo de divisas bajo un control de cambio desde 2003 y ha acentuado los filtros para la asignación de estas monedas en el último quinquenio debido a la crisis económica que sufre el país, principalmente por la caída en los precios globales del petróleo. EFE