Frente al optimismo de Trump, el Fondo Monetario Internacional ofreció unas perspectivas más cautas. EFE
El secretario del Tesoro de EE.UU., Steven Mnuchin, reconoció hoy que «probablemente» tome dos años alcanzar la prometida tasa de crecimiento anual de 3 %, una vez se apruebe la reforma fiscal, se avance en la agenda de desregulación financiera y se mejoren los acuerdos comerciales.
«En nuestras proyecciones, probablemente lleve dos años elevar el crecimiento anual al 3 % y entonces podremos tener un nivel sostenido. Eso es lo que estamos proyectando», dijo Mnuchin en la conferencia global del Milken Institute, que se celebra en Los Ángeles.
De este modo, el secretario del Tesoro rebajaba las expectativas planteadas por el presidente Donald Trump de acelerar rápidamente la actividad económica en EE.UU., al 3 % anual o más, frente a la media de su predecesor, Barack Obama (2009-2017), de en torno al 2 % anual.
«Obviamente, cuanto antes aprobemos la reforma fiscal, cuando antes logremos el alivio de regulación, mejor vamos a estar», aseguró.
Las declaraciones del jefe del Tesoro estadounidense se producen después de que el pasado viernes se diera a conocer el primer cálculo sobre la evolución del producto interior bruto (PIB), que fue de una decepcionante tasa anualizada de 0,7 %.
Sobre la reforma fiscal, de la que la Casa Blanca presentó un borrador genérico con recortes de impuestos para las empresas y los trabajadores pero en el que no detalló cómo compensará la consiguiente bajada de ingresos, recalcó que no generará déficit ya que se pagará sola con el impulso económico generado por las políticas de Trump.
«Esperamos pagarla a través del crecimiento económico y eliminando muchas deducciones. La diferencia entre crecer a un 2 % y un 3 % anual es cerca de 2 billones de ingresos fiscales a lo largo de una década», agregó el exbanquero de Wall Street.
Aunque Trump ha insistido en la necesidad de un agresivo estímulo fiscal que combine rebajas de impuestos y alzas en el gasto público, debe ser el Congreso quien ratifique la propuesta, y serán unas negociaciones plagadas de obstáculos pese a que los republicanos cuentan con la mayoría en ambas cámaras, como ha mostrado el rechazo legislativo a su reforma de la ley de salud.
Frente al optimismo de Trump, el Fondo Monetario Internacional ofreció unas perspectivas más cautas, al pronosticar un crecimiento del PIB de 2,3 % para EE.UU. este año y de 2,5 % para 2018. Washington, 1 may (EFE)