El pasado miércoles, 4 de mayo, el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) informó que el jugador español Santi Mina fue condenado a cuatro años de cárcel por violencia sexual contra una mujer, este pertenece al equipo Celta.
La Audiencia Provincial de Almería, lo absolvió de «agresión sexual», un delito más grave por el cual el Fiscal exigía 8 años de presión. Cabe indicar que esta categoría incluye la violación, que exige pruebas de violencia o intimidación.
El joven jugador tampoco podrá acercarse a menos de 500 metros de la víctima durante los próximos doce años según la sentencia.
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Los hechos se presentaron en la localidad de Mojácar (sudeste de España) el 16 de junio de 2017, cuando el futbolista que para ese momento pertenecía al Valencia, estaba de vacaciones en ese lugar con su amigo, el también futbolista David Goldar.
Ante esta situación, la defensa del jugador comunicó que recurrirá la sentencia, tras la que el equipo Celta tomó la decisión de apartar a su delantero.
Por medio de un comunicado, Celta ha decidido abrir «un expediente disciplinario al jugador Santiago Mina para dilucidar sus responsabilidades laborales a la vista de esta resolución».
«Por esta razón y de manera cautelar, se ha decidido apartar al jugador, provisionalmente, de los entrenamientos del primer equipo», concluyó el equipo celeste.