Una mujer transgénero apodada como «la doctora del trasero tóxico» pasará una década en prisión más cinco años de libertad provisional cuando cumpla la condena, por inyectar una tóxica mezcla compuesta de pegamento y sellante de neumático en el cuerpo de varias mujeres para hacer que sus glúteos crecieran. Una de sus «pacientes» murió.
Oneal Ron Morris, de 36 años, se declaró culpable ante un tribunal de la Florida por el delito de homicidio involuntario en el caso de Shatarka Nuby, de 31 años, quien falleció en un procedimiento luego de que esta mujer le inyectara la tóxica mezcla en 10 ocasiones, entre 2007 y 2010.
La víctima pagó USD $2,000 por el tratamiento de Morris, quien ya cumple un año tras las rejas.
La «doctora», quien no tiene licencia para ejercer la medicina, combinó cemento, aceite mineral, silicona, pegamento, sellador de llantas, entre otros productos tóxicos en el compuesto que inyectaba a sus pacientes.
Varias de sus clientes estuvieron presentes en la corte durante las audiencias, y aseguraron haberse sentido enfermas luego de las inyecciones.