La Paz, 28 dic (EFE).- El gobernador de la región de Santa Cruz en Bolivia, el opositor Luis Fernando Camacho, cumple este jueves un año de detención preventiva por una de las investigaciones por la crisis política de 2019 en el país, con una acusación formal por "terrorismo" por la que la Fiscalía pide que lo sentencien a 20 años de cárcel.
Camacho gobernó desde una cárcel en La Paz, lejos de Santa Cruz que es considerada el motor económico de Bolivia, donde además pasó por problemas de salud, y se iniciaron otros procesos judiciales en su contra.
Antes de su detención, el político lideró diversas manifestaciones en contra del Gobierno de Luis Arce, incluida una huelga de 36 días exigiendo la realización oportuna del censo de población y vivienda.
Siendo presidente del Comité Cívico Pro Santa Cruz, el ahora gobernador fue uno de los principales líderes de las protestas postelectorales que en 2019 exigieron la renuncia del entonces presidente Evo Morales (2006-2019).
Estas son las principales claves del primer año de detención preventiva del líder del partido opositor Creemos:
Detención
Camacho fue detenido el 28 de diciembre de 2022 en Santa Cruz en medio de un cuestionado operativo policial que ha sido calificado por líderes opositores como un "secuestro", ya que por unas horas se desconoció dónde estaba y luego se supo que fue trasladado a La Paz.
La aprehensión del gobernador cruceño se enmarca en una demanda presentada por la exdiputada oficialista Lidia Patty en el caso conocido como 'Golpe de Estado I', por la crisis de 2019.
El Gobierno de Luis Arce y el oficialismo sostienen que ese año hubo un "golpe de Estado" contra Evo Morales, mientras que la oposición señala que las protestas que derivaron en su renuncia fueron por un fraude a su favor en los fallidos comicios generales de ese año.
Dos días después de la detención de Camacho, un juzgado dispuso su detención preventiva por cuatro meses en una cárcel en el altiplano, medida cautelar que se amplió en tres ocasiones.
La detención y encarcelamiento de Camacho desencadenaron una serie de protestas en Santa Cruz por su liberación.
Gobierno desde prisión
En este año de detención, Camacho continuó gobernando desde la cárcel y, por ejemplo, firmó diversos decretos departamentales y resoluciones.
La defensa del opositor justificó que el estatuto autonómico cruceño indica que mientras no renuncie, fallezca o tenga una sentencia condenatoria, el gobernador puede continuar con sus funciones.
El Gobierno de Arce advirtió en su momento con iniciar un proceso penal si el vicegobernador de Santa Cruz, Mario Aguilera, no asumía como gobernador por "ausencia temporal" de Camacho, lo que finalmente no ocurrió.
Una sala constitucional de Santa Cruz concedió una "tutela" a legisladores departamentales del oficialista Movimiento al Socialismo (MAS) que pidieron una acción de cumplimiento para que Aguilera asuma como gobernador, pero la Asamblea Legislativa cruceña decidió mantener a Camacho en el cargo a través de una ley.
Situación judicial
La Fiscalía boliviana amplió la acusación de Camacho a los delitos de "cohecho activo" y "seducción de tropas", (atribución ilegal del mando), además del delito de terrorismo en el caso 'Golpe de Estado I'.
En abril un tribunal ordenó otros seis meses de prisión contra Camacho por un proceso por su participación en la huelga de 36 días, por el que se le acusa de delitos como resoluciones contra la Constitución, racismo y discriminación.
En junio un juzgado ordenó otros tres meses de detención preventiva por la supuesta compra irregular de un carro para bomberos, por la que se le investiga por incumplimiento de deberes y conducta antieconómica y hay otro proceso por una denuncia que observa un decreto que firmó Camacho por incumplimiento de deberes, entre otros.
La Fiscalía presentó el martes la acusación formal en contra de Camacho por el caso 'Golpe de Estado I' en calidad de autor junto a otras exautoridades, y pidió 20 años de prisión por terrorismo para el gobernador.
La familia de Camacho convocó a participar en esta jornada en una marcha en Santa Cruz en repudio a su detención.
Salud
Camacho padece de hipertensión y síndrome de Churg-Strauss, un mal que produce la inflamación de los vasos sanguíneos y que puede generar daños en los órganos, por lo que necesita una medicación especial y valoraciones médicas.
Su defensa protestó varias veces para que le den la debida atención en la cárcel, ya que según dicen en sus audiencias virtuales se le vio cada vez más delgado y con un deterioro físico, aunque el Régimen Penitenciario ha asegurado que se le ha dado la atención médica correspondiente.
En septiembre salió por primera y única vez para realizarse unos exámenes médicos en medio de un fuerte operativo de seguridad y retornó a prisión después de siete horas en un hospital.
Yolanda Salazar
Por: EFE