El 2 de octubre de 2016, Colombia tuvo una de las votaciones más importantes en su historia, luego de que se definiera si los ciudadanos estaban de acuerdo o no para firmar la paz con las Farc, y luego de que ganara el NO, los promotores de este sacaron a relucir algunas cosas que decía el expresidente Juan Manuel Santos y que no se cumplieron.
En principio, el presidente del momento anunciaba que, si ganaba el NO, Colombia volvería a guerra y que ahí se acabarían las negociaciones con las Farc. Resaltan que, pese a que ganó el NO, Santos reformó unos puntos del acuerdo y lo completó, según ellos, omitiendo lo que el país había elegido.
Otro de los puntos que critican es que Santos prometió que no habría impunidad en el país, y que ningún líder de la guerrilla llegaría al Congreso, sin antes pasar por la JEP y cumplir con su condena especial, tras la firma del acuerdo. En los primeros comicios al ejecutivo, cinco curules del Senado y cinco de la Cámara eran ya fijos para las FARC, así en las urnas no lograran ninguna.
Al acuerdo de paz también le relucen lo positivo
Y aunque los promotores del NO han demostrado su indignación durante estos cuatro años, quienes impulsaron el SÍ también han mostrado lo positivo de este acuerdo, que dividió al país.
Algunos aseguran que, por ejemplo, en los campos donde se encuentran algunos exfarc, custodiados por el Ejército, se propician espacios de paz y reconciliación, pues entre excombatientes y la Fuerza Pública dan ejemplo de perdón, y de que unidos se puede salir adelante.
Después de la firma también se comprobó que los hospitales militares disminuyeron su ocupación notablemente, en parte también porque luego del acuerdo se comenzó el diálogo con el ELN, y hubo también ceses al fuego importantes.
Y ahora, cuatro años después, el país aún se divide en una decisión que muchos apoyaron, de continuar con el perdón a las Farc, mientras que otros aún piden que no haya impunidad y que los líderes guerrilleros paguen por delitos atroces como secuestro, violación, terrorismo e instrumentalización de menores en el conflicto.